Sopresa y desaz\u00f3n entre los hosteleros de La Madrila condenados por el caso de los ruidos. Se muestran hundidos tras conocer que el Gobierno central ha decidido denegar el indulto a dos de ellos, los que gestionaban Down y La Belle. El Ejecutivo, a trav\u00e9s de Ministerio de Justicia, tiene ahora que resolver las peticiones del resto de los empresarios. Se espera que todas vayan en el mismo sentido, por lo que los once (adem\u00e1s de los gestores de Down y La Belle, los de Maquiavello, Latino’s, Barroco, Sugar, Submarino, La Cuerda y Tacones) deber\u00e1n finalmente ingresar en prisi\u00f3n. En este caso fueron condenados tambi\u00e9n a penas de c\u00e1rcel la exalcaldesa\u00a0Carmen Heras y el exconcejal de Seguridad Ciudadana Carlos Jurado.<\/strong>\u00a0En cambio, al ser sus condenas menores a dos a\u00f1os (un a\u00f1o y nueve meses), no deben entrar en prisi\u00f3n.<\/p>\n Los hosteleros, en cambio, fueron condenados por la Audiencia Provincial a dos a\u00f1os y tres meses (salvo uno que deber\u00e1 cumplir dos a\u00f1os y nueve meses). Deber\u00e1n estar como m\u00ednimo entre cinco y siete meses en un centro penitenciario hasta lograr el tercer grado. \u00abSon gente normal y trabajadora pero se les trata como delincuentes. A m\u00e1s de uno esta situaci\u00f3n le va a pasar factura\u00bb, aseguran los abogados consultados ayer por este diario.<\/p>\n El Ejecutivo resolvi\u00f3 de forma negativa los indultos en la reuni\u00f3n del Consejo de Ministros del pasado 30 de agosto, aunque hasta esta semana no se le ha norificado a las partes. Solo uno de ellos, el gestor de La Belle, ha recibido adem\u00e1s la orden de ingreso en prisi\u00f3n, para la que se le concede un plazo de diez d\u00edas para presentarse en el centro penitenciario de C\u00e1ceres. Cabe recordar que los indultos se han resuelto con bastante diligencia (en menos de ocho meses) y por un Gobierno todav\u00eda en funciones.<\/span><\/p>\n COMPA\u00d1EROS DEL SECTOR\u00a0<\/strong><\/span><\/p>\n El sector de la hosteler\u00eda no se explica c\u00f3mo ha podido llegarse a este punto. En realidad los condenados hab\u00edan solicitado un indulto parcial para lograr rebajar su pena tres meses. De esta forma, si la condena se quedaba en dos a\u00f1os de c\u00e1rcel, pod\u00edan eludir entrar finalmente en prisi\u00f3n (siempre y cuando la titular del juzgado lo aceptara). La mayor\u00eda se pregunta qu\u00e9 se conseguir\u00e1 con ello puesto que, aseguran, el problema no se ha solucionado y los ruidos contin\u00faan en esta zona de copas. Adem\u00e1s todos los condenados (salvo uno) han satisfecho ya las indemnizaciones a los vecinos afectados. Su entrada en prisi\u00f3n, insisten, no va a cambiar nada.<\/span><\/p>\n Una vez ingresen en la c\u00e1rcel, como a cualquier condenado, se les llevar\u00e1 a cabo una evaluaci\u00f3n inicial para decidir en qu\u00e9 m\u00f3dulo se alojar\u00e1n. Lo l\u00f3gico es que, por el tipo de delito y al no tener antecedentes, se les clasifique como segundo o tercer grado. Seg\u00fan esto se les ubicar\u00eda en m\u00f3dulos de respeto, donde cumplen condena presos que no son peligrosos y que no han cometido delitos graves o de sangre. Podr\u00e1n estar todos juntos aunque compartir\u00e1n duchas y cuartos de ba\u00f1o con el resto de los reos.<\/span><\/p>\n Tendr\u00e1n, como los dem\u00e1s presos internos, un r\u00e9gimen estricto de visitas. Los familiares podr\u00e1n acudir al centro penitenciario solo los viernes, s\u00e1bados y domingos pero siempre tras haber solicitado una cita de visita y que esta se les haya concedido. En este caso solo podr\u00e1n verlos y hablar con ellos a trav\u00e9s de un cristal. Y una vez al mes se les permite hacer uso de un vis a vis, para poder reunirse en una dependencia con su familia. Tendr\u00e1n restringidas tambi\u00e9n las llamadas telef\u00f3nicas.<\/span><\/p>\n