El 15,5% de los hogares espa\u00f1oles se queja de problemas de ruido producido por sus vecinos o en el exterior de sus viviendas, seg\u00fan la \u00faltima encuesta de condiciones de vida publicada por el Instituto Nacional de Estad\u00edstica (INE) en 2011.<\/p>\n
La contaminaci\u00f3n ac\u00fastica tambi\u00e9n merece una menci\u00f3n especial en el Informe de la Fiscal\u00eda General del Estado presentado este a\u00f1o. \u201cSe observa un importante n\u00famero de capitales de provincias de tama\u00f1o medio (…) o grande (…) en las que se ha incrementado el n\u00famero de procedimientos penales en materia de contaminaci\u00f3n ac\u00fastica\u201d, resalta el documento. Adem\u00e1s de Ja\u00e9n y Bilbao, subraya el caso de Valencia con cuatro procedimientos abiertos, uno de ellos por un casal fallero demasiado ruidoso.<\/p>\n
El hecho de que ahora lleguen m\u00e1s casos a la v\u00eda penal, como recoge la Fiscal\u00eda, refleja la mayor sensibilidad social existente a lo largo de los \u00faltimos a\u00f1os respecto al problema de la contaminaci\u00f3n ac\u00fastica, puesto que los problemas se han visto antes en otros juzgados. \u201cRecuerdo mi primer caso all\u00e1 por 1998, contra un bar, nos trataban como marcianos\u201d, relata el letrado Joaqu\u00edn Mart\u00ed, de Barcelona. \u201cNo exist\u00eda conciencia social de que era un problema\u201d.<\/p>\n
En cuatro a\u00f1os, las casas afectadas por agresiones ac\u00fasticas han ca\u00eddo 10 puntos.<\/p>\n
Esta misma sensibilidad creciente por las molestias derivadas del exceso de ruido, apunta Mart\u00ed, explica el que cada vez se cometan menos abusos y sean menos las familias que declaran sufrir por este problema. En 2009, la tasa de hogares afectados era del 22,8% y en 2007 del 25,7%, nada menos que 10 puntos m\u00e1s que las cifras de 2011. El fiscal jefe coordinador de Medio Ambiente de la Fiscal\u00eda General del Estado, Antonio Vercher, tambi\u00e9n destaca el aumento de sensibilidad: \u201cLa situaci\u00f3n est\u00e1 evolucionando\u201d.<\/p>\n
La v\u00eda penal es la \u00faltima y la m\u00e1s extrema para solicitar amparo por exceso de ruido. Debe concurrir en el demandante un \u201cgrave da\u00f1o para la salud\u201d, como recoge el C\u00f3digo Penal. Lo habitual es que los procedimientos comiencen en expedientes tramitados por los municipios o, en el caso de llegar a los tribunales, que se diriman antes en otras jurisdicciones. Como apunta el abogado Jorge Pinedo, especializado en este tipo de litigios, es m\u00e1s habitual la v\u00eda de lo contencioso-administrativo (ligada a problemas de licencias o actividades bajo control municipal, como la molestia por el funcionamiento de un ascensor) o la civil. En este caso, como procedimientos vinculados a las relaciones de vecindad. De hecho, la Ley de Propiedad Horizontal abre la v\u00eda a la comunidad de propietarios para la privaci\u00f3n del uso de la vivienda a un vecino molesto con el aval del juez.<\/p>\n
Cuando una queja se admite en un juzgado penal suele llevar a\u00f1os de recorrido y no es raro que ya haya sentencias previas en otros \u00e1mbitos.<\/p>\n