¿Alguna vez has notado que duermes mejor y más rápidamente con un ventilador sonando de fondo, el ruido del aire acondicionado o un televisor sin sintonizar?
Puede que tengas razón y tu percepción no te esté engañando. El fenómeno en cuestión es de sobra conocido por los expertos, que avalan en muchos casos la efectividad del ruido blanco para dormir.
Este tipo de ruido es monótono y constante, del tipo de los mencionados anteriormente. Para muchas personas es un bendita ayuda a la hora de dormir pero ¿qué hay de cierto en eso de que el ruido blanco es un sonido para dormir que funciona? ¿Qué dice la ciencia al respecto? Su popularidad ha hecho que muchos expertos opinen sobre su efectividad.
El cancelador de ruido por excelencia
El funcionamiento del llamado ruido blanco para dormir es bastante claro, y hay evidencia científica que avala este proceso: actúa como una especie de antirruido, es decir, de cancelador de otros sonidos. Cuando oyes un ruido que se mantiene constante, sin cambios, tu cerebro automáticamente bloquea los demás.
Lo que no está tan claro es la relación entre este ruido y la facilidad para dormir. Se sabe que puede conseguir eliminar distracciones, pero de ahí a ayudarte a conseguir un sueño reparador hay un trecho. Expertos como Seth Horowitz afirman que puede servir para bloquear sonidos molestos mientras dormimos, aunque es una afirmación que no está aún respaldada por la evidencia.
Definitivamente no existe evidencia científica que avale el funcionamiento del ruido blanco como somnífero, aunque eso no significa que no funcione. Sólo es necesario elaborar estudios de garantías con una muestra suficiente y un período de observación prolongado.
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Los argumentos contra el ruido blanco
Aunque la perspectiva de oír un sonido relajante, continuo y soporífero puede ser halagüeña si tienes problemas para dormir, quizás es mejor que te limites a utilizar otros trucos convencionales para conciliar el sueño. El ruido blanco no ha sido estudiado en profundidad, para bien y para mal.
Por eso no se sabe si a largo plazo puede ser dañino, como sostienen algunos científicos. Afirman que tener este sonido a tu alrededor mientras duermes hace que tu cerebro esté activo permanentemente y alerta por lo que pueda pasar, y eso a la larga puede generar problemas de ansiedad y de insomnio.
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Fuente: computerhoy.com
