Un total de 1.314 residentes de la colonia Ciudad Santo Domingo de Algete han presentado un incidente excepcional de nulidad de actuaciones ante el Tribunal Supremo por vulneración de la tutela judicial efectiva en relación al caso sobre el ruido de los vuelos del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, amenazando incluso con llevar al Estado ante el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo.

Un total de 1.314 residentes de la colonia Ciudad Santo Domingo de Algete han presentado un incidente excepcional de nulidad de actuaciones ante el Tribunal Supremo por vulneración de la tutela judicial efectiva en relación al caso sobre el ruido de los vuelos del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, amenazando incluso con llevar al Estado ante el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo. El Alto Tribunal dictó en 2008 una sentencia en la que se apreció la lesión del derecho fundamental a la intimidad domiciliaria como consecuencia del ruido producido por el sobrevuelo de aviones en esta urbanización. El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) dio por zanjado el caso al determinar que el fallo estaba ejecutado al haberse reducido el ruido. El incidente se interpuso el pasado viernes después de que el Supremo haya inadmitido el recurso de casación presentado contra el auto del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), de abril de 2017, que concluyó que la sentencia de octubre de 2008 debe considerarse ejecutada. Se trata de la cuarta ejecución de la Sentencia del Supremo de 2008, con numerosos autos del TSJM ellos recurridos en casación al Supremo, que hasta ahora había admitido todos ellos. Los residentes piden ahora al Supremo que acuerde plantear una cuestión de inconstitucionalidad ante el Tribunal Constitucional, ya que consideran que hay riesgo de convertir los recursos de casación “en un obstáculo para la tutela judicial efectiva, lo que supone vulneración del derecho fundamental al acceso a dichos recursos”. Según el abogado de los residentes, “la inadmisión del casación del Supremo vacía de contenido posibles recursos frente a autos en ejecución de sentencia, siendo de alcance supranacional”. “El mandato de sentencias podría ser burlado por un simple auto dictado en ejecución, con vulneración de la tutela judicial efectiva, es decir del derecho fundamental a la ejecución de sentencias”, señala el letrado. Además, según el abogado, “el Supremo ha prejuzgado anticipadamente el fondo del asunto, sin respaldo jurídico, lo que evidencia juicio arbitrario en la inadmisión de la casación, con vulneración del derecho a resolución motivada y fundada sobre el fondo del asunto”. Los recurrentes señalan que esta casación contra autos de ejecución es “atípica”. No se trata de enjuiciar la actuación del TSJM, sino garantizar el cumplimiento del fallo del Supremo de 2008. En este caso “la prueba es decisiva”, como señaló el propio Supremo el 7 de octubre de 2013. Tanto la Asociación contra el Ruido y Riesgo de Aeronaves de Ciudad Santo Domingo como la propia Comunidad de propietarios de la población consideran que si el Supremo no aprecia el incidente de nulidad, habrá que recurrir al Constitucional. Y en su caso al Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo contra el Estado español, señalando que “los estamentos judiciales no han proporcionado tutela judicial efectiva y la inadmisión es contraria a los principios de la Unión Europea”. AENA, ENAIRE Y MINISTERIO DE FOMENTO Los residentes reprochan que Aena, Enaire y Ministerio de Fomento no han tomado medidas desde la última sentencia del Supremo de 2017 que determinó que no se había ejecutado su sentencia de 2008. El colectivo considera que la lesión se produce en aproximadamente 14 por ciento de días del año, cuando las aeronaves aterrizan desde el Norte en Barajas y carece de sentido “emplear medias de ruido mezcladas con despegues hacia el Norte, que nada tienen que ver con la lesión”.