Una treintena de bares de copas firman un código ético contra el ruido
Las actuaciones de mera apariencia de los Ayuntamientosfrente a la contaminación acústica son el pan nuestro de cada día.
A propósito de la Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Navarra, Sala de lo contencioso-administrativo, de 27 de junio de 2017.
Mutilva Baja es una localidad de Navarra, cercana a Pamplona,que Pertenece al Ayuntamiento del Valle de Aranguren.
Se trata de un recurso sobre los derechos fundamentales. Parece ser que los apelantes son una comunidad de propietarios, lo cual resulta más que llamativo (en principio, las comunidades de propietarios no tienen derechos fundamentales).
Los ruidos proceden de la carpa joven instalada con motivo de las fiestas patronales. Se reconocen dañados los derechos fundamentales a la Inviolabilidad del domicilio e intimidad personal y familiar y, por tanto, la vulneración de los derechos de los vecinos de un edificio de viviendas, por la inactividad del Ayuntamiento frente a las inmisiones sonoras.